Un grupo de mossos, que siempre va de paisano y se dedican a la seguridad ciudadana, se iba a cenar el pasado sábado 8 de octubre cuando se toparon con un hecho que ellos consideraron delictivo. Paseaban por una de las calles cuando se encontraron dos patinetes que creían que habían sido robados.

Ante la situación deciden actuar y se llevan los patinetes a la comisaría, lugar en el que permanecen al no haber sido reclamados. La realidad es que los momentos previos a la incautación de los dos vehículos fueron, cuanto menos, tensos. Como se puede ver en las imágenes de portada, los agentes reciben los insultos de los vecinos de la calle desde sus terrazas. "Corruptos, borrachos, provocadores", se escucha en las viviendas de la zona.

Uno de los presentes lanza por su ventana una barra, hecho que obliga a uno de los agentes a sacar una defensa extensible, según han relatado ellos a laSexta. La actuación se ha saldado sin heridos. Albert Palacio, del sindicato de Mossos USPAC, ha asegurado en Más Vale Tarde que el modus operandi de los agentes es totalmente correcto. "Uno de ellos cuando se siente amenazado saca la defensa y se van girándose protegiéndose las espaldas", ha explicado.