Este lunes, en un tren que viajaba desde la estación de Sants de Barcelona a León, el interventor decidió bajar a un grupo de 22 niños de entre 9 y 11 años junto a sus dos monitores tras las quejas de los viajeros por hacer ruido.

En Más Vale Tarde, hemos hablado con Oriol Martínez, padre de una de las escolares expulsadas del tren, que reconoce su indignación ante lo ocurrido. Por el momento, los padres están "estudiando el caso" para ver si emprenden algún tipo de acción ante una acción "desproporcionada" del interventor.

En el vídeo, cuenta la versión que le dio su hija de lo ocurrido, la cual coincide con la dada por los monitores. "Con solo un aviso, les bajaron en la siguiente parada. Estoy súper indignado", lamenta. Cuando llegaron a la estación de Palencia, encontraron a personal de Renfe, Policía Nacional y el subdelegado del Gobierno en Palencia.

Tras la incidencia, se habilitó un autobús. Según Martínez, fue la Policía Nacional la que organizó este dispositivo "pagado por Renfe", aunque reconoce que no ha recibido respuesta por parte de la compañía.