Viktoria y Oleksiy, dos oriundos de Mariúpol que viven en España, han contado en Más Vale Tarde la poca información que han podido obtener de sus familiares, que viven en la ciudad asediada por las tropas rusas. En el caso de Oleksiy, hace poco ha podido saber que su padre ha fallecido a causa de un bombardeo. "Se estaba dirigiendo al sótano para refugiarse. Le faltaron pocos segundos para salvarse", ha contado.

"Me duele mucho, pero igual me duele saber que hay 400.000 habitantes que siguen sin nada: sin agua, sin luz, sin comida, sin ventanas en sus casas.... Sufren el mismo dolor de alma que yo, y sufren físicamente", ha lamentado el joven.

Explica además que la bomba que acabó con su vida cayó al lado de su casa, en el centro de la ciudad, dejando un cráter de 20 metros, y recuerda que al día caen entre 50 y 100 como esas, "sin contar lo que hace la artillería y los disparos por la ciudad".

La mujer de su padre sigue gravemente herida por el mismo ataque, que sucedió de madrugada: "Ella estuvo debajo de los escombros durante dos horas, a temperaturas de 10 bajo cero hasta que llegaron voluntarios para salvarla. Está herida muy grave".

Por todo ello, Oleksiy ha querido destacar la ayuda que se prestan entre desconocidos, y cuenta que en la ciudad "la gente está muy unida, ayudan y comparten todo para sobrevivir".