Tras conocerse que los padres de Marta del Castillo compraron la vivienda donde fue asesinada su hija y se la ofrecieron a Miguel Carcaño a cambio de que confesara el paradero de su cuerpo, Beatriz de Vicente apunta que "les aconsejaría que cerraran esta puerta".

La abogada y criminóloga advierte de "hay que ser muy prudente al hablar de alguien que se duele tanto de la pérdida violenta de un ser querido y más de un hijo" y señala que "mientras buscas el cadáver de tu hija, perpetúas de algún modo, aunque sea de forma casi ficticia, simbólica, su existencia".

"Pero la realidad es que esto, y lo digo con todos los respetos, empieza a a rozar el duelo patológico", afirma no obstante De Vicente, que recuerda que ya tuvo la oportunidad de hablar con los padres de la joven en una ocasión: "Les invitaba con todo mi cariño a cerrar el capítulo pese a que no encuentren ese cuerpo", afirma.

En este sentido, la experta recuerda que "Miguel Carcaño fue condenado por un delito contra la integridad moral y lo fue porque en ese juego de 'ahora está aquí, ahora está allí, ahora está allá', dañaba más si cabe a nivel emocional a esta familia". "En el fondo, es una manera de perpetuar un día detrás de otro la pérdida violenta de tu hijo y permitir que este sujeto siga jugando con sus emociones", advierte.