Iván Vaquero fue asesinado por un grupo de jóvenes de una paliza en Velilla de San Antonio, un municipio al este de Madrid. Según investiga la Guardia Civil, algunos de los implicados podrían ser menores de edad.
Ahora, los habitantes de la pequeña localidad madrileña se preguntan por qué asesinaron a Iván Vaquero, un hombre de 39 años vecino del pueblo.
Según apuntan los vecinos, sobre las 20:00 horas del pasado viernes se cruzó con un grupo de jóvenes, la mayoría menores de edad y muy violentos, a los que aquejó hacer pintadas en unos muros. Tras la discusión, los jóvenes acabaron dándole una brutal paliza. Los golpes se sucedieron por todo el cuerpo, e incluso en la cabeza.
José Carlos Asuero primo de la víctima, ha afirmado que "se le ha hecho la autopsia y tiene muchos daños". En declaraciones a Expediente Marlasca, Asuero ha explicado que en las últimas horas se baraja un giro en los acontecimientos, y que las pintadas fueran del propio Iván Vaquero: "Son muestras de cariño hacia la relación que él tenía y a consecuencia de ello un grupo de personas le increparon".
Los vecinos de Velilla afirman saber quiénes han sido los agresores, ya que en su gran mayoría se los ha encontrado alguna vez. José Carlos Asuero ha afirmado que Velilla es un pueblo pequeño y "todos conocen los altercados que ha habido días atrás: empezaron robando bicicletas, atemorizando a los niños y ha desencadenado en una salvaje agresión a una persona".
"Son un grupito de chavales jóvenes que han estado liándola por el pueblo", ha aseverado un vecino, mientras que otro ha afirmado que también pegaron una paliza al dueño de un establecimiento chino de alimentación.
La alcaldesa, Antonia Alcázar, ha asegurado que "la investigación va por buen camino y va a haber detenidos", tras una concentración de los vecinos esta mañana en respulsa por lo sucedido.
Iván era una muy conocido en la localidad, donde vivía con su madre. La víctima trabajaba en una empresa de extinción de incendios y su pasión eran los perros, por lo que colaboraba con varias protectoras. Por el momento, la Guardia Civil está tomando declaración a los testigos de lo ocurrido; sin embargo, aún no se han producido detenciones.