Enrique Abuín, más conocido como 'El Chicle', fue detenido en diciembre de 2017 por la desaparición y el asesinato de Diana Quer, del que ahora se cumplen tres años. Él mismo confesó haberla matado tras varias horas de interrogatorio.

A la espera de juicio, acumula una gran cantidad de pruebas que podrían condenarle. La Fiscalía recoge en su escrito de acusación que actuó "en contra de la voluntad" de la joven, "anulando cualquier posibilidad de escapatoria" en "un lugar aislado y solitario".

Abuín fue el principal sospechoso de la Guardia Civil desde noviembre de 2016, tres meses después de la desaparición de Diana en las fiestas de A Pobra do Caramiñal.

Tras sentirse vigilado, él mismo se puso en contacto con los agentes, pero empezó a incurrir en contradicicones. "Dice que esa noche estuvo con su mujer en las fiestas de A Pobra. Él se pone en el escenario", explicaba Manuel Sánchez Corbí, coronel de la UCO. "En noviembre le citamos a declarar como testigo, se equivoca, dice que sale a robar gasolina, ya no se sitúa en Pobra".

Su vehículo y el móvil de Diana fueron clave: tras una reconstrucción sin precedentes, se llega a la conclusión de que ambos salieron de A Pobra do Caramiñal por la misma salida y durante 16 minutos hicieron el mismo recorrido.

Así, en noviembre de 2017 los agentes no tenían ya ninguna duda de que a Diana se la llevó 'El Chicle' en su vehículo Un mes después, tras intentar repetir el crimen con el mismo 'modus operandi' en Boiro, es detenido.

Confiesa que mató a Diana Quer y sus diferentes versiones se convierten en una prueba más contra él: primero aseguró que fue un accidente, pero, tras hacerse pública la autopsia, afirmó que la estranguló, aunque negó en todo momento haber abusado sexualmente en ella.

Sin embargo, a Fiscalía asegura que la sometió "a una situación de horror y terror extremas", que "la manoseó con ánimo de satisfacer sus instintos sexuales", la violó e incluso "le colocó una brida plástica alrededor del cuello".

Considerándose probado que la agredió sexualmente y dada la brutalidad de su asesinato, la Fiscalía pide para él prisión permanente revisable.