Conocemos detalles de la versión del crimen de Manuela Chavero que el autor confeso de los hechos trasladó a la Guardia Civil. Afirma que la noche en la que ocurrió el crimen, el 4 de julio, le pidió a Manuela que fuese a su casa para recoger una cuna que le había dejado hace tiempo.

Fue la manera en la que consiguió que fuese a su domicilio. Delgado asegura que una vez allí mantuvieron una fuerte discusión y que Chavero acabó cayéndose, golpeándose la cabeza.

Lo cierto es que la Guardia Civil ha hallado un rastro de sangre en el pasillo de la casa, zona en la que Eugenio Delgado asegura que Chavero se cayó. El autor confeso del crimen ni siquiera tuvo que enterrar a Manuela: la metió en una antigua madriguera de zorros que tapó tras meter su cadáver y en la que se ha hallado el cuerpo casi por completo, salvo porque faltaba la vértebra C1, la ubicada más arriba.

Durante las horas que pasó con la Guardia Civil en la casa, Delgado hizo varias menciones sobre 'El Chicle' y a su condena de prisión permanente revisable, preguntando a los agentes si quedan restos biológicos en los huesos.

La intención de Delgado es negar la hipótesis de una presunta agresión sexual para evitar la condena de prisión permanente revisable. A la Guardia Civil todavía le queda por revisar una finca, tres coches y un tractor empleado por el detenido.