"En cuanto paraba de declarar, cogía el móvil y estaba todo el rato chateando". Es lo que ha asegurado la jefa del grupo de homicidios en el juicio del 'caso Maje', una actitud extraña que les hizo sospechar.

Asegura que la 'viuda negra' de Patreix "les pinta" a un Antonio, víctima del crimen, "con muy mal genio" y que al ser "echado para adelante", se enfrentaría a un ladrón que entrase en la casa, acto que le propiciaría la muerte. Una versión que no cuadra para el entorno de la víctima, que le pinta como bastante miedoso.

"Ella omitió algunas cosas que, al enterarse que las había dicho su amiga Rocío, llamó para matizar", explica un agente, que asegura que Maje cambiaba su forma de expresarse dependiendo con quién hablaba.

En una conversación con su amiga Rocío, queda clara la animadversión que siente por su familia política. "Hay una conversación en la que hablan despectivamente de su madre, que dicen: 'De esta no sale'", cuentan.

En la segunda sesión del juicio del asesinato a Antonio Navarro, se ha visto a Maje prácticamente estática y se ha conocido su último mensaje a su marido, en el que le animaba a disfrutar de una empanada.