La Policía ha logrado desmantelar con la 'Operación Maíz' el mayor punto de venta de droga de Madrid, ubicado en la Cañada Real. Un búnker con fuertes medidas de seguridad que funcionaba como un supermercado, con carteles luminosos en las paredes donde anunciaban los precios e incluso las ofertas.

Los agentes han detenido ya a 14 personas del 'Clan de los Kikos', herederos de otro célebre clan que operaba en la Cañada Real hace años. Además, la brigada de Policía Judicial ha incautado 19 kilos de cocaína y tres de hachís y heroína, y más de medio millón de euros en metálico.

Desde el local, que tenía tres puertas brindadas para que la policía no entrase, se podían vender más de 200 dosis al día. El ir y venir de compradores esta constante las 24 horas del día. De hecho, los denominados machacas, los que avisan de la presencia policial, se habían

reconvertido en aparcacoches.

José Antonio Rodríguez San Román, comisario jefe de UDYCO Madrid, ha explicado los detalles del caso en Expediente Marlasca. "Hemos desarticulado el mayor punto de venta de droga que había en la Comunidad de Madrid. Y hemos desarticulado toda su organización: la gente que recogía la droga, la que la compraba, la que la transportaba...", ha indicado.