Tres individuos fueron detenidos en la playa de Sabinillas, en Manilva, Málaga, tras ser perseguidos por la Guardia Civil al interceptar que conducían una narcolancha. La lancha iba descargada y los agentes barajan la posibilidad de que intentaban preparar un alijo, ya que podían haber acudido a la costa a recargar combustible que otro individuo, también identificado, poseía en una furgoneta en la misma playa.
Se les imputan delitos de desobediencia y también de atentado contra la autoridad porque ya en la costa, intentan huír de las patrullas de tierra e, incluso, lanzan piedras a los oficiales.
Es el último episodio de los numerosos que han protagonizado las playas de la Costa del Sol durante el 2018. Los sucesos vinculados a ajustes de cuentas asciende a 20, uno de los mayores de los últimos años, entre los que se registran tiroteos y apuñalamientos relacionados con el crimen organizado.