En lo que están trabajando ya los equipos de rescate es en extraer la tierra acumulada por encima del pequeño. Lo hacen a través de un sistema de piquetas diseñado por un ingeniero en tiempo récord. Es la forma más segura, pero más lenta. El siguiente paso consistiría en descolgar un arnés y alzarlo a la superficie.

La otra opción es la de construir un pozo paralelo para poder acceder al lugar donde se encuentra Julen. Aquí, el problema son las vibraciones que produciría. Además, habría que reforzar el pozo con un tubo, y eso llevaría demasiado tiempo.

La tercera opción es la de excavar a cielo abierto una ladera hasta llegar al lugar donde se cree que está el menor. Pero sería un trabajo que llevaría semanas. Cualquiera de las opciones es complicada, aunque los equipos de rescate trabajan sin descanso.