La Guardia Civil ha desmantelado un grupo criminal formado por tres hermanas que estafaron a una decena de ancianas en la Comunidad de Madrid con una especie de versión actualizada de la estafa conocida como 'tocomocho'.

Una de las implicadas abordaba a las víctimas en la calle, siempre señoras de avanzada edad, afirmando que creía tener un boleto de lotería premiado y no sabía cómo cobrarlo. En ese momento entraba en escena la segunda hermana, que simulaba ser abogada para dar credibilidad a la actuación.

El 'toque de gracia' lo ponía la tercera estafadora, a la que llamaban por teléfono y se hacía pasar por lotera, confirmando que el billete estaba premiado.

"Lo que hacen es engatusar a la víctima y convencerla para que se quede con ese supuesto décimo de lotería que está premiado. A cambio le piden dinero en efectivo o bien joyas", resume Ana Martín, portavoz de la Guardia Civil. Las ahora detenidas incluso montaban a las víctimas en su coche para llevarlas al banco más cercano.

A este 'modus operandi', conocido popularmente como el 'timo del tocomocho', estas delincuentes le añadían un elemento más: un amuleto, un collar artesanal con un bolsito que llevaba en su interior un micrófono y un GPS. Se lo ponían a las víctimas al llegar al banco para asegurarse de que no hablaban con nadie, porque ellas en la mayoría de los casos se quedaban en el coche a una distancia prudencial.

Entre las víctimas se encuentra la madre de Nuria, de 84 años. En su caso, el banco no le permitió sacar el dinero en efectivo, por lo que las asaltantes se quedaron con su bolso y su cartera y la dejaron en la puerta de una pastelería: para convencerla de que bajara del coche, le aseguraron que una de ellas tenía una bajada de azúcar.

Así, engañando y aprovechándose de las personas más vulnerables, las estafadoras se hicieron con un botín de más de 31.000 euros en efectivo y 6.500 en joyas.