José María Ortín, profesor de la Escuela Taurina de Murcia de 69 años, ha ingresado en prisión acusado de cometer abusos y agresiones sexuales al menos a diez alumnos, casi todos menores. Así actuaba el depredador de la escuela de tauromaquia, según los testimonios recabados: a los chicos les ponía películas pornográficas en unas sesiones que terminaban en sexo oral, mientras que a las chicas les daba masajes que acababan en sus genitales, algo que hacía supuestamente en una camilla en su propia casa, en la escuela o en su coche.
"Es una persona cordial, educada, correcta. Posiblemente, una de las últimas personas de las que se pudiera pensar que tuviera ningún comportamiento de este estilo", ha afirmado José María Caballero, abogado de la Escuela de Tauromaquia de Murcia, refiriéndose a Ortín.
De hecho, agresor sexual había pasado desapercibido hasta hace ocho días, cuando una persona se puso en contacto con la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer de la Policía Nacional de Murcia y les dijo que en la escuela de tauromaquia, dirigida por el diestro Pepín Liria, se estaban cometiendo delitos sexuales y que este lunes comenzaba el nuevo curso, por lo que la Policía actuó en tiempo récord.
Así, los agentes tomaron declaración a ocho presuntas víctimas de Ortín, de entre 11 y 27 años. Las agresiones se habían producido fundamentalmente en los últimos cuatro años, periodo en el que el detenido ha sido profesor, aunque una de las víctimas declaró haber sido violada hace más de una década. "Ha sido una sorpresa para todos. Sobre todo, para la gente relacionada con la escuela ha supuesto un shock", ha declarado el abogado de la Escuela de Tauromaquia de Murcia.
Según el atestado policial, Ortín está acusado de delitos de abuso y agresión sexual con penetración, pornografía infantil, provocación, lesiones psicológicas y coacciones. Sin embargo, pese a las acusaciones, el hombre ha asegurado a su abogado que es inocente. "No tengo constancia de las personas que son y de los hechos que se le pueden imputar", ha declarado Manuel Martínez, abogado del acusado.
El torero Pepín Liria, director artístico de la escuela, ha negado que Ortín fuese profesor, pero lo cierto es que la Policía le ha detenido ante el riesgo de que los menores volvieran a tener contacto con un supuesto depredador sexual. Y mientras buscan se buscan más víctimas de este antiguo novillero, los agentes han detenido a otro trabajador de la escuela que pudo saber lo que ocurría y no lo denunció.