La evidente falta de educación en sexología provoca diversos efectos negativos para los más jóvenes. Por ejemplo, la 'auto-educación' mediante la pornografía. Pero, ¿cuáles son las consecuencias de normalizar el porno?

Según el psicólogo y experto en sexología José Luis García, se trata de efectos "terribles". "Antes de los 16 años la mayoría de los jóvenes españoles se han expuesto a la pornografía, y son sus hijos, no sus vecinos, le guste o no a los padres", ha aseverado.

Ante esta situación, es importante que haya diálogos entre padres e hijos. "Yo propongo cinco o seis sesiones para hablar solamente de la pornografía, que es el referente más importante de la educación sexual de nuestros chicos y chicas, y eso no se puede permitir", ha explicado el sexólogo, que asegura que sus consecuencias son inadmisibles.

Son sus hijos los que lo consumen, no sus vecinos, le guste o no a los padres

Ejemplo de ello son algunas de las actitudes violentas que se llevan a cabo en las prácticas sexuales. "Hay suficiente documentación científica que nos dice que el consumo de pornografía, especialmente si es violenta, es un factor que exacerba las actitudes misóginas y favorece las conductas violentas en la práctica sexual", ha añadido.

Así, es ya extendido el concepto de generación de 'niños pornográficos' que aprenden a base de este tipo de películas. Contenidos que, además, ofrecen una imagen idílica de los cuerpos humanos, tanto de hombre como de mujer.

"La sexualidad y la violencia son incompatibles. No hay ninguna razón psicológica y ética que justifique la violencia sexual. Ya es de por sí preocupante que un actor se excite pegando a una actriz, y lo es más cuando es un niño", ha explicado José Luis García. En esta línea, el doctor ha destacado que hay niños que con tan solo seis años ya tienen su primer contacto con el porno.

Es preocupante que un actor se excite pegando a una actriz, y lo es más cuando es un niño

Además, el porno tiene un componente adictivo, similar al de las drogas o el tabaco. "El premio del porno es el orgasmo, y eso es lo que le concede un poder especial. Si un chico está viendo cómo un actor maltrata a una mujer y eso excita al actor y aparentemente a la mujer él se excite", ha relatado el doctor, que asegura que todo ello genera también una predisposición a la prostitución e incluso disfunciones sexuales.

Todo ello conlleva otro tipo de riesgos. "Es promover una conducta sexual irresponsable, no hay ni un condón en las películas sexuales", ha zanjado.