El alcalde de Palma de Mallorca, José Hila, ha afirmado que tiene ganas de que acudan a la isla turistas de cualquier nacionalidad porque allí se "vive del turismo", si bien ha llamado a la prudencia.

"El turismo puede funcionar después de esta pandemia y un plan piloto parece lo mejor", ha explicado Hila, que ha narrado cómo es el protocolo : "Empezamos con un número contenido de personas, menos del 1% de los turistas que solemos tener, así se demuestra a clientes, a los residentes y a los trabajadores que podemos revivir el sector turístico con toda seguridad".

Este plan podría dar al mundo una fotografía del protocolo. Y es que Baleares es uno de los lugares menos afectados por la pandemia, y es un referente turístico a nivel europeo.

Este 'corredor' se abre para turistas, pero no para extranjeros con segundas residencias en España, que aún tendrán que esperar para poder acudir a sus domicilios en las islas. "Hasta ahora es una prueba piloto para un número concreto de turistas", ha explicado el alcalde.

Aun así el alcalde ha apuntado a la necesidad de que exista un equilibrio y no se ponga en riesgo "lo que aquí se ha controlado por precipitarnos por salir al exterior", por eso, ha dicho, se ha elegido el mercado alemán. "Los británicos en cuanto superen esta pandemia también podrán volver, pero siempre ante todo la seguridad", ha apuntado.