Picar manualmente la roca "es lo más aceptable", asegura Jesús Sierra, minero y exjefe de la Brigada Central de Salvamento. Pero si la perforadora ha encontrado piedra muy dura, "los mineros previsiblemente también lo harán", apunta. Por ello, se podrían utilizar microexplosiones.

Primero, se hará de manera manual, utilizando el martillo de picar. Si no consiguen picar la dura piedra, entonces, habría que hacer pequeñas microexplosiones que "no afectarían el entorno".

Además, el minero ha reiterado lo que sus compañeros ya han explicado con anterioridad: están acostumbrados a trabajar en sitios "muy confinados". En estos casos, las personas tienen casi incluso "más resistencia que la maquinaria", cuenta Sierra. La psicología de grupo y el trabajo en equipo que se están haciendo también son muy importantes.

Sobre establecer plazos, "en estas condiciones son difíciles". Los problemas con los que se han ido encontrando los trabajadores hacen que no puedan cumplirse. "No es bueno que haya una presión tan extrema sobre la responsabilidad de los que allí están trabajando", alerta Jesús Sierra.