El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha propuesto a la exministra de Justicia, Dolores Delgado como fiscal general del Estado. Desde diversas asociaciones de fiscales han mostrado su sorpresa por dicha elección "ya que acaba de cesar como ministra de Justicia", lo que consideran como "insólito y lesivo".

En este sentido se ha pronunciado el magistrado Joaquim Bosch en Más Vale Tarde. Aunque asegura que es "una excelente profesional que conoce la Fiscalía como la palma de la mano" y que la tiene aprecio personal, cree que su nombramiento "no favorece la separación de poderes y no es positiva para la credibilidad institucional y la apariencia de imparcialidad y de autonomía que debe tener la Fiscalía".

Bajo su dirección estarán asuntos clave como los permisos penitenciarios de los presos del procés y el futuro judicial de Puigdemont. Y así o señala Bosch: "En el ámbito judicial se resuelven muchas cuestiones vinculadas a intereses partidistas y la ciudadanía lo que necesita es que haya una apariencia de neutralidad en la actuación de los poderes públicos".

Eso sí, el magistrado hace un apunte ante las críticas sucedidas desde diferentes partidos tras el anuncio del nombramiento: "Resulta llamativo que hoy se estén rasgando las vestiduras quienes en anteriores gobiernos han instrumentalizado la Fiscalía, han pretendido que actúe a su dictado y han controlado hasta el máximo posible la cúpula judicial con absoluto desparpajo y con cierto exhibicionismo.

"Lo que corresponde es acometer reformas estructurales para que la separación de poderes sea claramente percibida por el conjunto de la sociedad", concluye Bosh.