40.000 millones de euros, es la cifra que Hervé Falciani asegura que sale cada año de España de manera ilegal. "Es el equivalente a la deuda pública", afirma Falciani.

Dinero que, evadiendo a Hacienda, va a parar directamente a paraísos fiscales amparados, además de por el secreto financiero, por la falta de responsabilidad política. "El Gobierno de España no tiene interés en querer acabar con la corrupción. Si quisieran hacer algo o combatir el fraude fiscal, su estrategia no estaría aquí".

Falciani se presenta como candidato al Parlamento europeo. Cree que si se acaba con el fraude fiscal se podría salir de la crisis sin políticas de austeridad. Un control que, según él, no interesa a algunos líderes.

"El PP no habla jamás de corrupción, de cómo luchar contra el fraude. No se puede tener fe en la gente que está tomando decisiones hoy, porque al final no se sabe quien está detrás y quién manda de verdad".

Según él, algunos nombres de sobra conocidos se esconden detrás de las pautas de un partido. "Bárcenas, Blesa... están por detrás. Están ahí. Existen, no son fantasmas, y son sólo un ejemplo".

Para el exinformático del banco suizo HSBC algunas carencias convierten a la corrupción en un delito sin culpables. "No van a la cárcel. Políticos y banqueros son especialistas en no ir a la cárcel. El sistema tendría que cambiar". Hervé Falciani promete convertirse en el dedo acusador de los grandes evasores europeos. Y lo quiere hacer con un partido español porque, para él, España es un ejemplo de país que lucha contra la corrupción.