Chanel estuvo ayer compartiendo anécdotas y momentazos en El Hormiguero, donde tuvo algún que otro problema con su vestido rosa palabra de honor que no paraba de bajarse. En algún momento incluso se pudo apreciar el pequeño truco que usaba la cantante: una cinta adhesiva que, al ver que no funcionaba, incluso se quitó en directo.

Además, compartió con Pablo Motos uno de sus mayores miedos: que se le cuele la saliva por el otro lado, lo que le provoca tanta tensión que se le cierra la garganta y no puede respirar. De hecho, cuenta que le ocurrió al finalizar la grabación de su último videoclip ante la atenta mirada de su equipo, que, afirma "pensaban que estaba agradeciendo al día de rodaje".

"Como miedo me parece un poco flojo", comenta Iñaki López, que como 'experto' asegura que "le puedo recomendar cuatro o cinco miedos de verdad, de los incapacitantes".