En plena ola de calor, el técnico de emergencias del SAMU Miguel Assal incide en las altísimas temperaturas que se pueden llegar a alcanzar dentro de un vehículo aparcado al sol y advierte sobre los despistes mortales que siguen produciéndose al olvidar a mascotas o niños pequeños dentro del coche.

"Hace poco murió un bebé muy pequeñito porque su madre se lo había dejado olvidado y entró a hacer la compra", lamenta Assal, que explica que "si estamos a 25 grados en el exterior y salimos a hacer una compra, ir al cajero o cualquier cosa", debemos "tener en cuenta que el coche al sol en unos minutos va a alcanzar 20 grados más de la temperatura que hay en el exterior". Una temperatura que "no es soportable para el humano" y mucho menos "para un niño o para una mascota".

Para prevenir estos trágicos olvidos, el experto aconseja realizar un sencillo gesto siempre que cojamos el coche: "Nunca dejéis nada en el asiento del copiloto", insta. "Vuestros objetos personales, del trabajo, el móvil o cualquier cosa útil para ese día lo dejáis al lado de la sillita, al lado del bebé en el asiento de atrás", aconseja en su lugar. De esta manera, eliminaremos la posibilidad de olvidarnos al niño en el asiento trasero.