María de los Ángeles falleció el 3 de noviembre en un hospital de Sevilla por un cáncer de colon perforado. Durante 5 años sufrió terribles dolores, acudió a varios centros hospitalarios en la provincia de Sevilla y, sin embargo, no obtuvo ningún diagnóstico. Nadie detectó que padecía cáncer hasta que se encontró en su lecho de muerte, de hecho, ni siquiera pudo recibir cuidados paliativos.

Lo primero que le diagnosticaron fue una hernia discal, pero el dolor no mejoraba con el tratamiento. Llegó a visitar más de 10 especialistas de cinco hospitales diferentes mientras alegaba un dolor insoportable.

Durante todo el proceso perdió 20 kilos y apenas se podía levantar de la cama. Su hija, desesperada, decidió volver a llevarla a urgencias, donde le diagnosticaron un problema de salud mental y le acusaron de estar llamando la atención.

La semana pasada volvió al hospital sin poder soportar el dolor. Entonces, por fin, le dieron el diagnóstico definitivo. Pero ya no servía de nada. María de los Ángeles ya padecía metástasis y un fallo multiorgánico que acabó con su vida el 3 de noviembre.