Ante los casos de pinchazos a jóvenes en discotecas, Carlos Quílez explica en Más Vale Tarde que los Mossos d'Esquadra han llegado a la conclusión de que "en Francia se encuentran los antecedentes" de este tipo de hechos y señala que, además, la mayoría de las víctimas son de nacionalidad francesa.

Así, el experto en seguridad apunta que se está buscando en el ámbito de "turistas franceses que habrían transportado esta forma de intentar anular la voluntad de las mujeres". "El origen se está ubicando en tierras francesas y en individuos de nacionalidad francesa", insiste.

¿Con que intención se están perpetrando estos casos de sumisión química? Quílez afirma que "anular la voluntad de una persona únicamente tiene como objetivo el intentar doblegarla para abusar de ella", ya sea "desde el plano sexual" o bien para robarle. Asimismo, explica que "la Policía está recabando todas las grabaciones del momento de los hechos de todas las denuncias a fin y efecto de encontrar un patrón común o de identificar a las personas que lo estarían haciendo".

Por otra parte, Quílez explica que "en algunos casos ha habido analítica y en ningún caso ha aparecido sustancia identificable alguna". En este sentido, señala que este tipo de sustancias suelen perdurar pocas horas en sangre.

No obstante, apunta que "los Mossos han incautado a un individuo una serie de cápsulas de botecitos de inyectables que se utilizan fundamentalmente en los hospitales" a un individuo con "antecedentes por tráfico de drogas". Estos -agrega- contenían unas sustancias que "a priori, en el lugar donde se ha producido la detención, que es en la puerta de unas discotecas en la Vila Olímpica de Barcelona", la Policía autonómica entiende que son "compatibles con las que pudieran haberse utilizado" en los pinchazos.