La primera vez que María Jiménez denunció públicamente la violencia machista que sufría por parte de su marido, Pepe Sancho, lo hizo en un programa de televisión en el que se encontraba Boris Izaguirre. El presentador de Más Vale Sábado, ha contado en Más Vale Tarde cómo vivió ese momento.
"Con Pepe Sancho colaboré muchas veces en 'Moros y Cristianos'. Era muy querido, pero fue muy chocante cuando María vino a este programa a contarlo. Estábamos hablando de una persona que conocíamos, también muy vinculado a Javier Sardà", ha indicado.
En este sentido, ha asegurado que "ahora, recordándolo, María Jiménez tuvo que pasar por una cosa tremenda que sucedía mucho en ese momento y que tiene que ver con el poder del machismo que es que desmerecía su testimonio porque era famosa, porque era María Jiménez".
Izaguirre ha explicado que María Jiménez cambió cuando lo dejó definitivamente con Pepe Sancho: "Le amargó mucho no sentirse respaldada, respetada, porque en ese momento era imposible que empatizaras con alguien así porque ponías la barrera que protegía el machismo. Lo que había que hacer era tenderle la mano y decirle 'lo que le está pasando, le pasa a mucha gente en este país'".
Fue precisamente el hijo de la cantante el que declaró en contra de Pepe Sancho para constatar los malos tratos que sufrió su madre. Así, Izaguirre ha asegurado que se acuerda de una noche en la que contó los hechos públicamente: "Ella estaba tensísima porque ella sabía que se estaba metiendo en un lío para ella misma muy conflictivo, porque no es grato narrar cosas tan violentas".
Palizas, ahorcamientos, violaciones y cadáveres
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El contexto La cárcel de Saidnaya era la joya de la corona en la represión que el régimen de Bashar al Asad ejercía sobre la población de Siria. En ella se realizaron todo tipo de violaciones de los derechos humanos.