En un supermercado de Lugo, un trabajador ha sido despedido porque estaba todo el rato mirando el móvil, lo que terminó repercutiendo en su rendimiento. Los jefes aseguran que le avisaron sobre esta conducta, que estaba prohibida y que le estaría llevando a incumplir las tareas que tenía asignadas.

"No sé si me parece justo teniendo en cuenta que hemos visto a la presidenta de un Congreso de los Diputados jugando al 'Candy Crush'", comenta Iñaki López en el vídeo sobre estas líneas, donde Benjamín Prado asegura que "como padre de niños de 9 años, creo que habría que limitarnos el móvil a todos".

Elisa Beni, por su parte, hace una reflexión sobre la adicción al móvil que Beatriz de Vicente define como "una buena defensa de sala" y la abogada explica que, tras consultar con compañeros especializados, "cuando el uso del teléfono es abusivo y afecta en el desempeño de trabajo, encajaría dentro del despido procedente".