El codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria, Jesús Núñez Villaverde, cree que el reciente ataque de las tropas rusas a un hospital infantil en Mariúpol "es un ejemplo trágico más de una dinámica en la que ya esta instalado Putin, que es la de abrir una nueva etapa que incluye ataques indiscriminados a la población civil". Así lo cree el experto "viendo el fracaso de su primera etapa, cuando (Putin) pensaba que un ataque inmediato, relámpago, iba a conseguir quebrar la resistencia de los ucranianos, derribar el Gobierno de Zelenski y tomar el control del Donbás".

"Se encuentra con un problema añadido, y es que, ahora mismo, prácticamente el 100% de las fuerzas que había ido acumulando alrededor de la frontera con Ucrania, en Bielorrusia, están ya embedidas en combate. Por tanto, no tiene capacidad ni para rotar esas unidades, y las bajas, accidentes y deserciones obligan a contar con esas unidades de reserva", ha expuesto en Más Vale Tarde Núñez Villaverde, que ha añadido que tampoco cree que Putin tenga "la capacidad suficiente para llevar el asalto final a Kiev".

Para el experto, "estamos en esa situación que lleva a pensar que no hay salida, que Putin va a seguir adelante con el aplastamiento, la masacre indiscriminada, el desprecio al derecho internacional humanitario, las normas más básicas de la guerra". Aun así, el codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria ha destacado la pérdida de credibilidad de la narrativa rusa que empleaba Putin al principio de la guerra, cuando aseguraba que iba a "liberar al pueblo ucraniano de un régimen genocida y nazi".

"Es curioso cómo simultáneamente se ha ido hundiendo toda esa narrativa rusa y al mismo tiempo se ha sabido responder de maravilla desde Ucrania, con un líder absolutamente improbable hace dos semanas y que ahora se ha convertido en una referencia de la resistenvia", ha valorado Núñez Villaverde, que ha concluido destacando que "la batalla del relato la está ganando sin ninguna duda Ucrania".