La presentadora Ruth Jiménez ha sido la última afectada por el deepfake pornográfico y reconocía en Más Vale Sábado haberse sentido "vejada, humillada y violada" a pesar de que el cuerpo no era suyo. Pero también "culpable" al ver los vídeos porno de otras famosas que habían generado con inteligencia artificial.

"Esto tiene repercusiones psicológicas que tienen que ver con la rumiación de los sentimientos de culpabilidad", le explicaba la psicóloga forense Ana Isabel Gutiérrez, que le aclaraba que a este sentimiento también contribuía el que "mucha gente no sabe que el vídeo es falso y te juzgan por tu conducta".

Además, y según explicaba Ana Isabel Gutiérrez a Ruth Jiménez en este vídeo, la víctima "acaba desarrollando síntomas físicos y psíquicos", como "angustia, tristeza o ansiedad" y "a largo plazo acaba desarrollando cuadros ansiosos o depresivos o problemas físicos".