Oriol Junqueras afirma en Lo de Évole que no tiene" más privilegios que el resto de presos": "Tengo el mismo trato, todos mis compañeros son testigos de ellos", destaca el político catalán, que lleva casi tres años en la cárcel.

"Intento colaborar con todos, doy clases, me preocupo de todos y juego con ellos, la relación es buenísima y si tuviera privilegios no podría ser tan buena", declara Junqueras.

Preguntado por Jordi Évole si la cárcel le ha cambiado, Junqueras responde que, "si lo ha hecho, seguro que ha sido para bien": "Mis ideas y principios no han cambiado, igual me ha hecho un poco más amable, aunque ya lo era antes".

Évole también le pregunta sobre cómo resumiría con una imagen lo que es no tener libertad. "Cuando tus hijos se van a casa y tú te quedas, esa es una imagen potente e intensa", destaca Junqueras. Eso sí, el político afirma que, "afortunadamente, su "familia está muy bien, muy fuerte y muy acompañada": "La gente nos quiere y eso ayuda".

Además, Junqueras destaca que "hay presos que no reciben la visita de nadie durante años": "Aquí se ve lo mejor y lo peor del alma humana, y eso, ayuda a entender mejor a las personas".

Otros momentos destacados

El político reflexiona en Lo de Évole sobre cómo es convivir únicamente con hombres durante casi tres años: "La mayoría de mujeres saben gestionar las relaciones humanas con mas habilidad e inteligencia".

Jordi Évole pregunta a Oriol Junqueras si ha vivido alguna situación "chunga" en la que ha pasado miedo en la cárcel. El político recuerda que "en el pabellón en el que estaba antes había asesinos, violadores... gente que había cometido crímenes terribles". Además, destaca "algún encontronazo": "Aquí hay gente con mucha testosterona".