Eduardo Strauch recuerda en Lo de Évole que cuando fueron rescatados tras pasar 72 días en los Andes, sintieron "nostalgia". "Nos vamos a alejar de ese lugar donde hemos vivido 72 días de horror y sentimos nostalgia. Es una cosa rarísima. A mí, al menos, me pareció rara", reconoce.

En este sentido, Eduardo expresa que en ese momento comenzó "un periodo largo de felicidad absoluta y, sin embargo, sentía nostalgia" por todo lo que habían dejado en la montaña. "Creamos una la sociedad de la nada, pudimos salir por nuestros propios medios y mi mente nunca fue tan libre como allí", destaca al respecto.

En lo referente a las diferencias entre la sociedad anterior a esa experiencia y la sociedad que crearon en la nieve, el superviviente de los Andes subraya que quizás que cada uno fue él mismo "sin esas máscaras" que se tienen puestas. "Siempre decimos que nos conocemos más que nuestras propias mujeres, y seguro que es así, porque ahí nos despojamos de todo", expresa.