El gobernador de la región italiana de Campania ha anunciado que instaurará el toque de queda en la noche del 31 de octubre para impedir que se celebren fiestas por Halloween, y evitar así la propagación del coronavirus en la zona.

Los motivos de prohibir las fiestas van ligados a la grabe situación epidémica que vive Italia y muchos otros países a raíz del COVID-19, pero el gobernador no sólo ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para tratar de contralar la expansión del virus, sino que también ha arremetido contra la festividad de Halloween, originaria de Estados Unidos.

Así, el gobernador ha calificado esta fiesta como un "monumento a la imbecilidad" y una "inmensa estupidez americanada que hemos importado en nuestro país".

Cabe señalar que el 1 de noviembre, al igual que en España, es un día festivo en Italia por el Día de Todos los Santos. Las fiestas de Halloween al estilo estadounidense que se desarrollan en la noche anterior se han vuelto muy populares también en países europeos, donde la gente se disfraza, se junta con amigos y celebra fiestas temáticas.

Por ello, en la región de Campania han decidido cerrar todos los locales a las 22:00 horas durante ese fin de semana.