El corresponsal principal de Al Jazeera en la Franja de Gaza, Wael Dahdouh, grababa el pasado miércoles unas imágenes del cielo nocturno sobre el asediado territorio palestino cuando recibió una terrible noticia: toda su familia había muerto. Su esposa, su hijo y su hija habían perdido la vida en un ataque israelí.

Conoció la información mientras trabajaba. Dahdouh, de 53 años de edad, vestía su uniforme de periodista y se dirigió al hospital para identificar los cadáveres. Sin embargo, apenas 24 horas después de la tragedia, ha vuelto a coger un micrófono para seguir haciendo su trabajo: informar.

"Ellos eran realmente importantes, pero era mi deber volver al trabajo lo más rápido posible, a pesar de todo", ha manifestado el profesional, como puede observarse en el vídeo superior. "Yo siento que es mi deber, a pesar del dolor y la herida abierta, volver frente a la cámara y contarles lo más rápido posible", asevera.