El panteón de Fernando Buesa ha sido vandalizado esta noche. La tumba del dirigente socialista asesinado por ETA en el año 2000 ha aparecido atacada con pintura negra y heces. Este es el segundo ataque que sufre el panteón familiar de la familia Buesa ubicada en el Cementerio de Santa Isabel de Vitoria en las últimas 24 horas. Ayer también pintaron el monolito en memoria de Buesa y de su escolta Jorge Díaz, según ha denunciado la teniente de alcalde de Vitoria.

Joaquín Castellón ha arrancado el programa con un contundente alegato en contra de un acto vergonzoso: "La dignidad de Fernando Buesa ni siquiera la rozan quienes han atacado su tumba con heces y pintura. No la ven ni de lejos. Su ejemplo y su legado es (son), lo mejor de la sociedad vasca".

Al ataque a su tumba, luego se ha sumado la vergüenza política de siempre. Arnaldo Otegi y la portavoz de Bildu en el ayuntamiento de Vitoria han mostrado su "más absoluto y rotundo rechazo". Pero la formación abertzale no ha querido firmar una declaración institucional con el resto de partidos. El problema para la autodenominada izquierda abertzale ha sido que en el texto aparece la palabra "condena".

Esto ha generado la polémica de siempre. El contexto del País Vasco, la indignidad en la que se vivió durante muchos años, los pasos que se van dando y el dolor que todavía hoy en día perdura allí. Aunque eso ya lo saben. No se lo vamos a descubrir y si no, lean por ejemplo la obra de Fernando Aramburu 'Patria', y lo entenderán bien.

Le callaron para siempre. Y aunque se intente ultrajar todo lo que significa, sus ideas se han quedado para la eternidad. Por eso, laSexta Clave ha querido volver a escuchar a Fernando Buesa para que sus palabras vuelvan a sonar. Y lo ha hecho recordando su famosa intervención ante las Juntas Generales de Álava en julio de 1999: "Hay que construir país, convivencia en paz y libertad, respeto por el pluralismo social y cultural. Construir convivencia, un país para todos, en el que los sentimientos de identidad nacional o cultural no resulten categorías políticas, porque todos pueden expresar los suyos con libertad. Un país en el que la única categoría política que confiere derechos y obligaciones sea la ciudadanía, que no distingue ni discrimina a nadie por razón de sexo, raza, religión, opiniones políticas, identidades nacionales o culturales, ni sentimientos".