La princesa Leonor comenzará en septiembre su formación militar con vistas a ese futuro reinado. Cuando alcance el trono, será la primera vez que una mujer ostente el mando supremo de nuestras Fuerzas Armadas. Esto puede llegar a ser considerado incluso una revolución, ya que hace solo 35 años que las mujeres han tenido acceso a las Fuerzas Armadas.
Concretamente, desde el 24 de febrero de 1988 se permitía entrar a las mujeres a algunos cuerpos y escalas, aunque no a todos. No podían entrar a la Legión, la Brigada Paracaidista, en operaciones especiales o en puestos de "especial" peligrosidad. De las casi 300 mujeres que se presentaron, 27 entraron en las academias militares españolas.
Hubo que esperar hasta 1999 para que el principio de igualdad total dejase de vetarles determinados puestos o destinos. A día de hoy, la cuota de mujeres ya alcanza el 13%, un ascenso que se catapultó hasta 2006, cuando se logró llegar al 12%.
La primera mujer en ingresar en las Fuerzas Armadas tiene nombre y apellidos: Patricia Ortega. Ella ingresó en la academia de Zaragoza, pasando a ser la primera teniente coronel en 2009, la primera coronel en 2015 y la primera mujer general en la historia de España en 2019.
Si miramos a nuestro alrededor, vemos que los datos de España son buenos pese al estancamiento de los últimos años. La media de presencia de mujeres en nuestros cuerpos ha crecido por encima de la media de la OTAN, superando el 6% de media con un 9,4% en nuestro país.
Casi son 16.000 mujeres en todos los cuerpos y escalas del Ejército, por delante de países como Italia o Polonia, pero por detrás del 20% de Hungría.
