En Salamanca han estado a punto de comerse otro pufo de los buenos: el megaproyecto del Dubái salmantino ha saltado por los aires. Ni 15.000 millones de inversión, ni jeques, ni viviendas de lujo. Todo falso. El ayuntamiento ha descubierto que el asesor del proyectomintió en su currículum y que la promotora inmobiliaria era falsa.

Estos mega proyectos muchas veces no son más que humo. ¿Se acuerdan de Eurovegas? En 2012 este proyecto de un multimillonario estadounidense prometía invertir 20.000 millones de euros para convertir unos terrenos en Alcorcón en el casino más grande de Europa. Todo con el beneplácito del Gobierno de la Comunidad de Madrid, de Esperanza Aguirre primero y de Ignacio González después, que incluyo inspeccionó el terreno. El proyecto era tan ambicioso que el gobierno madrileño estaba dispuesto a cambiar la ley para que se pudiera fumar en los locales de Eurovegas. Finalmente no llegó a materializarse. Ni en Alcorcón, ni en Cataluña que también sonó.

Allí bastante tuvieron con gestionar otro gran proyecto que tampoco cristalizó. Se llamaba 'Barcelona World', pero iba a estar en Tarragona. Se empezó a gestionar en 2012, iba a estar listo en 2016, pero 11 años después, este proyecto sigue en fase de aprobación. Lleva años estancado entre trámites burocráticos y legales. Y todo apunta que Barcelona World será otro proyecto que quedará en el olvido.

Como ya ocurrió con 'Reino Don Quijote', la versión manchega de Eurovegas. En 2005 otra empresa de casinos de las Vegas se fijó en Ciudad Real para fundar una ciudad que homenajeaba al personaje de Cervantes. Se suponía que la inversión iba a ser de más de 6.500 millones para levantar 8.000 viviendas, hoteles de lujo, tres campos de golf y por supuesto, casinos. Pero tampoco salió adelante.

El viaje por los megaproyectos descarriados nos lleva a Huesca, al desierto de los Monegros. En 2007, 'Gran Scala' iba a ser el epicentro del juego en España y el Sur de Europa. Una inversión de 17.000 millones de euros para construir 32 casinos, 70 hoteles o cinco parques temáticos. El Gobierno de Aragón, del Partido Popular, hizo algo parecido al de Madrid con Eurovegas. Creó una ley 'ad hoc' para que este proyecto fuera posible. Pero la caída de Gran Scala tiene una historia turbia detrás. Uno de los portavoces de la empresa inversora acabó en prisión por asesinar a su esposa. Además, esta empresa solo pagó una mínima parte a los propietarios de los terrenos y, de la noche a la mañana, desapareció dejando el proyecto empantanado.

En Madrid, además del mítico Eurovegas podemos sumar otros dos proyectos a esa lista negra de vendedores de humo. Uno conocido popularmente como 'Alu-china', promovido por un grupo inversor chino en el barrio de Aluche. Viviendas de lujo, centros comerciales y hoteles para una inversión total de 3.000 millones de euros. Un año después desistieron de esta idea. La lista de mega proyectos fracasados la cierra 'Madrid Live Resort'. Otra apuesta de un grupo estadounidense. La inversión presupuestada: 2.200 millones de euros. La ubicación: San Fernando de Henares. Un resort dedicado al ocio con restaurantes, hoteles, casinos, espectáculos estilo 'broadway' y hasta un circo permanente. La Comunidad de Madrid tardó solo cuatro meses en tumbar el proyecto por creer que era "inconsistente" y "poco fiable".