En un año normal, estos días serían los más críticos del virus de la gripe. El año pasado, por ejemplo, en la primera semana de febrero se contagiaron oficialmente 275 personas en España. Este año la curva ha disminuido a cero.

Lo mismo ocurrió de octubre a comienzos de febrero de 2020 hubo 1.395 casos, mientras que en el mismo periodo de este año han sido solo siete. En el vídeo principal de esta noticia se puede observar el gráfico de la curva que muestra el cambio radical: en color morado se dibuja la trayectoria del año pasado y en color azul la de este.

La gripe, este invierno, se ha esfumado. Pero, ¿por qué hay tan pocos casos de gripe? Existen tres motivos principales.

El primero de ellos tiene que ver con la campaña contra la gripe de vacunación masiva. Este año, con la presencia de la COVID, han sido más los que se han animado a vacunarse contra la gripe. Por ejemplo, más del 75% de los mayores de 65 años y del personal sanitario se inocularon la vacuna.

El segundo motivo reside en el propio COVID. Según algunos estudios, el SARS-CoV-2 habría ganado terreno al virus de la gripe al ser más efectivo en su labor de infectar.

Pero, sin duda, el más relevante de los elementos ha sido el uso de las mascarillas. ¿Deberíamos entonces seguir utilizando la mascarilla al margen de la COVID para futuras temporadas?

Lo cierto es que es la propuesta de muchos expertos, sobre todo de cara al invierno y a la época gripal, y para grupos de población de riesgo, ya que la gripe se trasmite del mismo modo que el COVID, cuando emitimos partículas por la nariz o la boca. La mascarilla podría servir así como barrera.

A esta propuesta se han añadido también políticos como el consejero se Salud de Cantabria, que ha asegurado que "deberíamos plantear exigir además de la vacunación el uso de la mascarilla para futuras campañas".

Además, hay otras enfermedades se han visto mermadas por las mascarillas. Es el caso de los resfriados comunes, la neumonía o las gastroenteritis.

Sin embargo, las opciones de que los occidentales asuman las mascarillas para siempre son escasas. Es "prácticamente imposible", según los expertos, ya que nunca hemos utilizado este tipo de herramienta contra las enfermedades.