Entre las personas que Israel podría liberar en el intercambio de rehenes está la activista palestina Ahed Tamimi, detenida por el ejército Israelí el 6 de noviembre en Cisjordania. Acusada de incitar al odio y la violencia, Tamimi, de tan solo 22 años, ya había sido detenida en 2015 y se convirtió en un símbolo de la resistencia palestina.
Su valentía se hizo viral cuando, desarmada, se enfrentó a dos soldados israelíes después de que su primo fuera herido de gravedad durante una protesta por autoridades israelíes. El incidente, grabado por su madre y compartido en redes sociales, generó debate tanto en Palestina como en Israel sobre los métodos utilizados por el ejército.
Su detención en 2018, días después de que las imágenes se hicieran públicas, no logró silenciar las críticas internacionales. Bajo el hashtag #FreeAhedTamimi, la comunidad internacional se centró en las detenciones de menores por parte de Israel. Tras pasar ocho meses en prisión, Tamimi reapareció ante las cámaras sonriendo, declarándose culpable de 12 cargos, incluyendo incitación a la violencia, pero demostrando que ni la cárcel ni los colonos israelíes podrían doblegar la resistencia palestina.
La activista, tras su anterior liberación, emprendió una gira internacional explicando la causa palestina, siendo recibida en diversos parlamentos y medios de comunicación. Ahora, su nombre vuelve a resonar, recordando al mundo que la lucha por el pueblo palestino persiste, incluso a través de las barreras de la prisión.
La reciente noticia de que Tamimi está entre las 50 mujeres palestinas que podrían ser liberadas en un posible intercambio de rehenes ha vuelto a ponerla en el centro de la atención internacional. La lista, aprobada por el Gobierno de Israel, incluye a mujeres encarceladas por diversos motivos, y Tamimi destaca por su historia de valentía y activismo. Su arresto en noviembre de 2023 se relaciona con un mensaje en redes sociales que supuestamente publicó, aunque la familia lo niega, alegando que la cuenta y el mensaje fueron falsificados para desacreditarla.
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