Este mes de junio, el 'Ford Fiesta' será historia. La multinacional estadounidense dejará de fabricarlo cuando acabe este mes. Ford va a apostar con fuerza por el vehículo eléctrico y el 'Fiesta' no entra en esos planes. Se va a jubilar después de 50 años de servicio.

Cuenta la leyenda que Henry Ford II, el dueño de Ford, se fue de vacaciones por Italia. Allí alquilo un Fiat, uno pequeñito. Él acostumbrado a los grandes coches americanos se quedó sorprendido por su manejabilidad y poco consumo. Quiso hacer algo parecido, pero en su propia marca.

Ahí, nació el 'Ford Fiesta' o 'Fordfi', como muchos lo llaman. Un coche americano, pero con nacionalidad española. Porque el primero se fabricó en la planta valenciana de Almussafes, en octubre de 1976. Hubo incluso movilizaciones para conseguir que la factoría se instalara allí.

En aquel año, el Rey Juan Carlos I inauguró la fábrica con Henry Ford II como anfitrión. El 'Fiesta' era un vehículo fruto de la crisis del petróleo. El mercado demandaba coches pequeños que consumieran poco. Aquel día era difícil imaginar el exitazo que tendría este pequeño vehículo con ese nombre tan atractivo.

Y sí, cómo no iba a atraer a los jóvenes un coche llamado 'Fiesta'. Fue un éxito rotundo de ventas. De Almussafes han salido 22.000.000 de unidades de este coche. Se convirtió en un icono para la juventud de los años 80. Tanto que el 'Ford Fiesta' ya forma parte de la historia de nuestra música. Quién no recuerda la letra de ‘Devuélveme a mi chica’, de los Hombres G.

El primer modelo del 'Ford Fiesta' tenía 40 caballos de potencia, medía unos tres metros y medio y pesaba sólo 800 kilos. Con el paso de los años ha ido creciendo y engordando. Este era el tatarabuelo o más. Porque ha habido ocho generaciones del 'Fordfi'. Siempre dirigidos al público joven, por eso su publicidad intentaba captarlos a ellos.

A principios de los años 80, el modelo costaba 555.000 pesetas, lo que ahora serían casi 3.500 euros. Por supuesto, contaba con radiocasete. Era lo que le importaba a los jóvenes: que el coche tuviera música.

El 'Fiesta' también trajo importantes innovaciones, sobre todo en seguridad. Fue el primer coche de su segmento en incorporar dos sistemas sin los que ahora mismo no concebimos un coche: el freno ABS y el airbag del conductor.

El último modelo poco tenía ya que ver con el original. Pero los tiempos han cambiado más rápido que el 'Fiesta'. La llegada del coche eléctrico ha puesto punto y final a una historia de amor del mítico modelo con nuestras carreteras. Un descanso merecido para el 'Fordfi'.