La dominación financiera es una práctica sexual y financiera que consiste en que un "sumiso" consiente y paga los caprichos -que van desde electrodomésticos hasta viajes o cenas de lujo- a su "dominatrix" porque eso le produce placer sexual. Esta, a cambio, le humilla y le insulta.

En La Roca han contado con Arola Poch, psicóloga, para entender esta práctica sexual, y aunque no se tienen muchos datos sobre cuántas personas practican este tipo de dominación sí afirma que ocurre tanto en parejas homosexuales como heterosexuales, aunque ene estas últimas predominan los roles de mujer dominante y hombre sumiso.

"La excitación que produce pagar las cosas de la otra persona refuerza la práctica y la conducta", ha explicado la experta, por lo que puede llegar a ser complicado abandonar este tipo de prácticas incluso aunque supongan la ruina económica del "sumiso". Eso sí, "el deseo sexual no es algo fijo y habrá momentos en los que haya más necesidad y más ganas", ha indicado.