"Me vas a perdonar, Jacobo, pero lo tienes hecho todo un cristo", dice con sorpresa Emilio Doménech cuando Jacobo Monereo, emprendedor en agricultura regenerativa, le lleva a una de las tierras de cultivo de La Junquera, Murcia. Pero nada más lejos de la realidad. "Esto es una técnica regenerativa. La llamamos cubierta vegetal", le explica al presentador de Gabinete de Crisis.

El agricultor la compara con la crema solar que nos echamos los seres humanos para evitar las quemaduras solares. "Protege el suelo de las inclemencias y de la erosión, mejora la calidad del suelo, retiene mucha más agua, mejora la infiltración y es el hábitat perfecto para un montón de polinizadores y de otro tipo de fauna", detalla.

Otro de estos métodos son las líneas de cultivo no alineadas que siguen el contorno de la pendiente para frenar la erosión. "Pasamos mucho tiempo de sequía y de repente llueve de golpe y cada vez es más extremo. Para crear 10 centímetros de suelo se tarda entre 1.000 y 10.000 años. Todos los años estamos perdiendo esa cantidad de suelo" con el arrastre que provocan estas lluvias torrenciales, cuenta. Con esta forma de cultivar se crean pequeños diques que bajan la velocidad del agua, frenando la erosión.

Para conservar la mayor cantidad de agua posible a pesar de la escasez de lluvias utilizan charcas como la que el agricultor enseña al periodista. "Es un potenciador de vida y biodiversidad increíble", algo de aún más valor cuando se está prácticamente en mitad de un desierto.