El coordinador de Protección Civil del Ayuntamiento de Cádiz, José Manuel Calvo, explica por qué evacuar la ciudad por un tsunami "es una locura": "Si todo el mundo intenta moverse el caos estaría asegurado". "Desde el terremoto previo, a que haya un maremoto, tenemos entre 30 y 45 minutos, aproximadamente, y en ese tiempo no podemos mandar gente por el mar, la vamos a mandar a lugar de exposición", declara Calvo, que afirma que eso se convertiría "en una ratonera".

Por eso, Calvo explica que en vez de evacuar a la ciudad o intentar huir por carretera, "la estrategia para sobrevivir es la evacuación vertical", es decir, "buscar un edificio después del terremoto, que no haya resultado dañado, a unos 15 metros de altura". Y es que Calvo asegura que "estaríamos en una situación de autoprotección": "Cada municipio se tiene que salvaguardar, porque va a afectar a toda la costa, desde Portugal hasta Málaga".

"Incluso la comunicación desde la ayuda exterior hacia Cádiz puede verse comprometida", detalla el experto, que respecto a la planificación se debe "trabajar en principio para recibir ayuda aérea". "Ten en cuenta que la ciudad de Cádiz es una isla, una isla conectada", recuerda Calvo, que destaca que aunque los puentes "están preparados para un episodio sísmico, pueden verse perjudicados tanto en la zona de Cádiz como en la de Puerto Real".

"La población que se va a salvar solo lo conseguirá a través de la autoprotección, tú contigo mismo y tus circunstancias", destaca Calvo, que afirma que "no puedes pensar en que en una situación de estas la administración te va a salvar": "La administración vendrá después".