La última edición del Capital Fest en Talavera de la Reina congregó a 13.000 personas para un festival que se celebró en plena ola de calor: cuando los asistentes recogían sus pulseras, la temperatura superaba ya los 35 grados, pero la organización tranquilizó al público a través de las redes sociales asegurando que habría agua gratuita para beber y refrescarse.

Equipo de Investigación entrevista a una de las asistentes, Esther, que lo recuerda como "el peor día de festival" que ha vivido. Según su testimonio, había "un trocito de carpa que era la única sombra que había y hacía mucho, mucho calor". "En Talavera de la Reina a 45 grados pues era un solar", resume la joven, que recuerda cómo la Cruz Roja no daba abasto: "Ibas al baño y había alguien tirado en el suelo, ibas a la barra y había alguien tirado en suelo, hubo muchísimos golpes de calor", rememora.

La joven, que es sanitaria, afirma que ya desde el primer concierto vio que "aquello no iba a salir bien". Además, sostiene que en un momento dado "se acabó el agua de las fuentes" y "en los baños la poca agua que quedó hasta que se acabó también salía marrón". Mientras, asegura, a los organizadores "ni se les veía, ni se les esperaba".

Las críticas proliferaron también en las redes sociales, con mensajes que hablaban de "colas infinitas para conseguir una botella de agua" y "40 grados sin una sombra" y "el agua de los baños cortada". "Vamos a morir todos", rezaba incluso uno de estos tuits, como puedes ver en el vídeo.