El profesor de ciberseguridad Carlos Seisdedos se fijó en José Luis Huertas, un joven que protagonizaba hackeos mediáticos y que empezaba a ser conocido en las redes sociales como una suerte de 'Robin Hood' que regalaba cosas a sus seguidores.

Todo surgió cuando conoció su perfil de Instagram a través de un conocido. Le pareció "curioso", un "perfil interesante" y empezó a charlar con él. "Sinceramente, me pareció un chaval que tenía muchas posibilidades, un chico muy curioso. Conmigo fue muy educado y cordial".

"Lo vi un chaval que en aquel momento, en aquella instancia, todavía era recuperable. Al ser un chaval tan joven y viendo esas capacidades y viendo que estaba en el punto de inflexión entre el bien y el mal, pues un poco mi idea era hacer ese acompañamiento hacia el bien para sacarlo del mal, por decirlo de alguna forma", cuenta al programa de Equipo de Investigación.

Cuenta además que la relación se mantuvo inclusodespués de la detención, y llegó a pedirle si conocía a algún abogado que pudiera representarle. El joven hacker estaba dispuesto a cambiar su rumbo, asegura, pero luego "se desvió".