Angie era la mujer de uno de los hosteleros más importantes de la noche canaria. El matrimonio vivía en una de las zonas más exclusivas de Gran Canaria y ella era habitual en las tiendas de Loewe, Adolfo Domínguez o Gucci. Sin embargo, el matrimonio duró solo seis años, ya que el marido fue encontrado muerto en extrañas circunstancias en la casa familiar.

En ese momento, Angie se marchó de Canarias viuda, con su hija, y una herencia de cerca de medio millón de euros, y se fue a vivir a uno de los barrios más exclusivos de Barcelona. Las tiendas de marcas más caras, las joyas millonarias y el glamour era el mundo de Angie.

¿Cómo se costeaba su vida de lujo?

Según ella contaba, vivía de la herencia que le dejó su marido empresario. Además, decía que tenía unos ingresos mínimos de 6.000 euros al mes, y más de 100.000 euros al año que le asignaba su padre taxista.

Angie se movía por tiendas donde los vestidos no bajaban de los 1.000 euros, unos precios prohibitivos, que no impedían a la asesina de Ana Páez escatimar en nada. Además, de acudir a uno de los gimnasios más caros de Barcelona, la mujer tenía cuatro coches.

El primero, un Porsche por el que pagó más de 100.000 euros. Asimismo, tenía un BMW de 40.000 euros, un Golf de 15.000 euros y un Hummer de 90.000 euros. "De hecho, el primer Hummer en Barcelona lo tuvo ella", señaló la periodista Mayka Navarro a Equipo de Investigación.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación que laSexta ha vuelto a emitir este sábado.