Los residentes de una urbanización de Marbella tienen un control exhaustivo de cada vivienda y se envían fotografías y vídeos de los asaltos de los okupas por un chat. En este vídeo puedes ver cómo se han convertido en vigilantes de su propia urbanización para evitar las okupaciones.

"Hemos vivido asustados, hemos hecho piña e incluso hemos tenido 'un grupo de vigilancia'. Cada vecino controlaba si había una persona nueva o si entraba en una casa. Además, todos los vecinos pusimos alarmas y cámaras por el miedo", expresa una vecina.

Hablamos con un okupa que se ha instalado en una de las mansiones de la urbanización, quien niega que viva allí y dice sentirse "incomodado" ante nuestras preguntas.

A continuación, contactamos con la propietaria más activa de la urbanización, quien ha evitado que se okupen al menos diez mansiones, aunque no ha podido impedirlo en las cuatro que rodean su vivienda, algo que le quita el sueño por la noche: "Estamos mal. No podemos dormir porque estamos todo el día pendiente de si se meten en una casa o en otra", relata, a lo que añade que se ha planteado vender su casa, aunque se ha "desvalorizado por los okupas": "Mi casa puede valer más de dos millones y ahora lo que te ofrecen son 800.000 euros", lamenta.