Los abogados del Estado buscan pruebas para el juicio y van al Colegio de Notarios de Madrid. Allí se firma la venta del Pazo de Meirás en 1941. Con un documento, Franco lo pone a su nombre. Los herederos de Pardo Bazán lo venden por 85.000 pesetas. La Abogacía del Estado es el órgano que denunció a la familia Franco para recuperar el Pazo.

"Hicimos una investigación en los archivos notariales y descubrimos que existía una escritura pública del año 1938, en el cual, la entonces propietaria del Pazo de Meirás, heredera de Emilia Pardo Bazán, lo vendía a un organismo que se llamaba Junta Propazo del Caudillo", ha contado a Equipo de Investigación Consuelo Castro Rey, abogada general del Estado.

Castro Rey ha añadido a este respecto: "Esto ponía de manifiesto que la venta posterior que se hizo en el año 1941 por parte de la misma propietaria era simplemente una simulación para permitir que Franco dispusiese de un título con el cual inscribir a su nombre el Pazo en el registro de la propiedad".