La Guardia Civil descubrió cómo Jordi, un joven ciberestafador leonés, controlaba a su red de colaboradores a través de notas de audio en las que simulaba ser colombiano: "Tú si aceptas mi oferta, desde este momento, eres de los míos, lo que significa ser de los míos es que me debes respeto, sinceridad y lealtad ante todo, y yo te voy a dar dinero y protección, y esas son las condiciones, si tú quieres ser de los míos, yo te voy a cuidar", se escucha decir al presunto mayor ciberestafador de España.

Equipo de Investigación localiza a la persona que capta para la presunta organización cuando acude a la Ciudad de la Justicia de Valencia para declarar como acusado por un delito de estafa.

"Es verdad que yo le conseguí un par de chicas y me dio 1.000 euros. Y luego supuestamente cada facturación que hicieran ellas yo iba a cobrar un 10% de lo que facturaran", reconoce Luis Miguel Surian, quien añade que Jordi llegó a abrir entre "ocho y diez cuentas bancarias" a su nombre. "Más de 200.000 euros seguramente que ha hecho a mi nombre ese chaval. Ese me ha jodido la vida", manifiesta.