Bernardo Montoya fue acusado de matar a su vecina 23 años antes del crimen de Laura Luelmo en la pequeña localidad de Cortegana, en Huelva. Cecilia, la víctima de 82 años, iba a testificar contra él en un juicio.

Emilio Díaz, guardia civil retirado, explica cómo fue ese crimen en Equipo de Investigación: "Los vecinos estaban todos perfectamente enterados de que Cecilia había tenido un problema con Bernardo Montoya, le había intentado una vez y le había robado otra, y tenía un juicio dentro de pocos días. Las vecinas le aconsejaban que le quitara la denuncia, que era gente mala que le podían hacer algo, pero Cecilia se encabezó en que no y que no, y que el juicio 'palante'".

"Le había asestado las puñaladas de arriba a abajo hasta que le llegó al corazón y una vez que le llegó al corazón, se contabilizan que son en total siete que acaban con la vida", explica Díaz, que asegura que "hubo premeditación" en el crimen.

Además de asesinar a la anciana, Montoya también le robó 100.000 pesetas y aseguró ante la Guardia Civil que la culpable fue Cecilia: "Nos cuenta que la culpa la tuvo la anciana, que la anciana no le quiso quitar la denuncia que le había puesto, que él no le había robado".

Un asesinato por el que Bernardo Montoya fue condenado a más de 17 años de cárcel. Entonces tenía 26 años y se le impuso una pena de alejamiento de Cortegana: no pudo volver a este pueblo de casi 4000 habitantes, donde transcurrió buena parte de su infancia y juventud.

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La carrera delictiva de Bernardo Montoya no se limita al asesinato de esta anciana en 1995 y el crimen de Laura Luelmo y es que en 2015 asaltó a dos señoras para robarles y, según cuenta un funcionario de prisiones a Equipo de Investigación, intentó apuñalar a un funcionario en la cárcel. A pesar de ello solo cumplió tres años de condena y salió en libertad tres meses antes de asesinar a Laura Luelmo ya que había cumplido la totalidad de la condena. En este vídeo puedes ver el testimonio en Equipo de Investigación.

Además, durante un permiso penitenciario en 2008, Bernardo Montoya asaltó a una mujer que pudo escapar gracias a su perro, que intentó defenderla. El animal se llevó una puñalada del asesino confeso de Laura Luelmo. En el vídeo que acompaña estas líneas puedes ver el relato que hizo uno de los vecinos sobre el suceso.

Uno de los hermanos de Bernardo Montoya localizado por Equipo de Investigación ha explicado que tras los crímenes la familia se siente señalada y puntualiza que no todos "son iguales". Además, cuenta en este vídeo que la carrera delictiva de los hermanos se debe a "las drogas": "Empezaron de jóvenes por aquí".