Una investigación vecinal destapó una trama de alquiler de pisos turísticos ilegales en la ciudad de Barcelona. La fotografía y el nombre de los apartamentos era falso, pero además también tenían un número de licencia usurpado a otros apartamentos.

La investigación comenzó cuando observaron que un gran número de pisos eran ofertados por el mismo anfitrión: "nos percatamos de que en los portales de Airbnb, Homeaway y Booking que fue donde encontramos estos pisos, en muchos casos, usaban un número de licencia falso o usurpado de otra licencia", explicaba uno de los vecinos que aseguraba que los números eran escogidos de forma aleatoria.

"De manera que la gente que ve el piso en el portal, ve un número de licencia y se piensa que es legal, pero no lo es", concluye, asegurando que se podía acceder a esos apartamentos desde los portales de Airbnb, Homeaway y Booking.

Todo ello a cargo de la empresa 'Donec Perficiam S.L', gestionada por diversos propietarios y sin datos de facturación desde 2015. Su administrador, Mark Serra, abandonó el cargo meses después de que los vecinos destaparan los casos.