Los sicarios suecos son parte de la noche marbellí; la ola de violencia de la Costa del Sol afecta a los restaurantes de la zona, que son los primeros damnificados. Los empresarios sufren pérdidas económicas y los turistas temen ser sorprendidos sen mitad del tiroteo.

Hasta 30.000 euros asegura un turista que ha pagado por pasar tres noches en la lujosa ciudad malagueña. Es holandés, y explica que los tiroteos no le asustan: "Es cultura aquí", afirma.

"Así vemos nosotros Marbella, es la capital del dinero de drogas. Los camellos están en Holanda, aquí vienen los patrones, todos los jefes de las drogas", asegura, y reconoce que él siempre lleva "protección privada" y le da un motivo: "Hay muchos criminales".