El abogado Juan Antonio Viñuales, de Martínez-Echevarría, confirma que son muchos los españoles que van hasta Turquía para someterse a algún tratamiento. También los que sufren algunas complicaciones y acuden a ellos para denunciar la situación.

"Nos suele llegar en torno a una o dos veces por semana clientes que han tenido alguna complicación", señala. Los casos van desde reducciones de estómago, liposucciones, rinoplastias, glúteos hasta implantes odontológicos.

Sin embargo, en la mayor parte de estos casos les recomiendan que no es viable llevar el proceso adelante por el tiempo y el coste que supone: entre los 2.000 o 6.000 euros.