Con solo 13 años David Guerrero es un virtuoso del arte, un genio de la pintura en Málaga y llegan a compararlo hasta con el mismo Pablo Picasso.

Un cuadro del Cristo de la Buena Muerte, su última obra, le hace saltar a la fama. Logra que su trabajo se exponga en una galería de arte e incluso despierta la atención de los medios de comunicación. Un periodista le pide hacer una entrevista unos días después y el niño accede. Esa misma tarde, después de salir del colegio, llega a casa, se toma su merienda, sale por la puerta y a partir de ese momento desaparece en la primavera de 1987.

"El 3 de abril estuvimos en la inauguración y un periodista le preguntó si podía pasarse en unos días porque le iba a hacer una pequeña entrevista. Él respondió que sí y el día 6, tras merendar se fue y a partir de ahí, ya...", recuerda emocionada Antonia Guevara, su madre.

José Manuel Alday, periodista, ha analizado el trayecto que pudo hacer ese día: "Nada más salir, el chico debería dirigirse hacia la parada del autobús, que está a 400 metros. Ningún conductor de autobús recuerda haberlo visto ese día. la Policía tomó declaración a todos los conductores que prestaron servicio esa fecha y ninguno recordó haberlo visto subir". David no sube al autobús, ¿dónde está?

La Policía trabajó con una hipótesis. Juan Antonio O'Donell, exinspector, recuerda que una camarera de hotel encontró una servilleta en la habitación de un ciudadano suizo que contenía varios datos: incluía el nombre del menor, David Guerreo, y su barrio. A pesar de lo relevante de la información, la camarera no declaró ante la Policía hasta pasados tres años.

A partir de ahí, los agentes consiguieron seguir la pista del misterioso ciudadano suizo y lograron una imagen suya. Casualmente, su rostro coincidía, aparentemente, con una caricatura que el pequeño niño pintor dio a una amiga.

Dibujo del niño pintor de Málaga y ciudadano suizo investigado por la Policía en el caso

La Policía fue tirando del hilo, registró las pertenencias que el hombre tenía en Suiza, pero la pista acabó en un callejón sin salida. El hombre murió en Marruecos y las autoridades del país no autorizaron que la investigación prosiguiera allí.

Cuando se cumplieron 29 años de su desaparición, la familia tuvo que tomar una dura decisión: darle oficialmente por muerto. "Me siento muy nerviosa por tener que dar este paso, que es muy desagradable. Sin embargo, la ley es la ley", afirmaba entonces su madre.

José Javier Gallardo, abogado de la familia, explica por qué tienen que actuar así: "Era hacer esto, o tener que dejar la herencia del padre sin adjudicar [...] sin la declaración del fallecimiento de David Guerrero no se podía repartir la herencia de su marido. Legamente sigue siendo un heredero más y tenía que comparecer con los demás hermanos y la viuda para firmar la aceptación de la herencia. Como, por desgracia, eso no podía hacerse, el único paso previo para hacer todo esto era hacer esta declaración".

"No se puede dar por fallecida a una persona hasta que transcurren diez años desde las últimas noticias", añade el abogado.

De David Guerrero no se tienen noticias desde abril de 1987, cuando tiene 13 años y tras salir por la puerta de su casa su rastro se pierde para siempre.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2017 que laSexta ha vuelto a emitir este viernes.